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Nuevo Curso

LA CARCEL. EL CAPITALISMO COMO SOCIEDAD DE VIGILANCIA Y CASTIGO

El Libro se puso un nombre, un título  . Dice que se llama “La cárcel: el invento que nació fracasado».

Si se lo mira desde los propósitos explícitos que le dieron fundamento para su irrupción, todos en contexto de la idea de recuperación. reinserción social, hay que adherir al título ya que efectivamente nació fracasado. Ahora bien, como lo existente no es más que su concreción en el hoy de un desenvolvimiento histórico particular , puede decirse también, que en su mismo formato originario se guardaban las tendencias necesarias para que, andando y desenvolviéndose mostrara otros fines y propósitos, y con referencia a ellos, el sistema carcelario, tributario de la relación delito-pena y castigo como modo de control social institucional y herramienta de dominación de clase , no fracasó sino que se fue reconfigurando a los diversos estadios del capitalismo , para sobrevivir hoy simplemente como mecanismo de invisibilización y desubjetivación, de quienes existen en su interior,  confortando los deseos de mayorías y operando como herramienta instrumental de apremios corporales, vejaciones y torturas

Precisamente, este mundo invisible es el que nos  pone ante nuestros ojos  Wam Eliam, en este libro que se nos hace necesario rescatar en estos momentos en que el aparato propagandístico democratizante y de republicanismo vació se ocupa de hacer oscura la oscuridad

De ,”La cárcel: el invento que nació fracasado , difundimos  “EL VIAJE”

Te despertaste con todo el cuerpo dolorido y un sabor feo y dulzón en la boca.

Notaste que tus ojos tardaban en acostumbrarse al color gris oscuro que todo lo rodeaba y cuando al fin lo hicieron viste que no todo era gris… también vislumbraste alguna gama de rojos, marrones y azules, todos los colores entremezclados y te diste cuenta que podías respirar cuando de manera penetrante entró por tus pulmones ese olor nauseabundo mezcla de carne podrida, cucarachas, mierda y meada.

Con mucho dolor alcanzaste a girar el cuello y sentiste una puntada fuerte en la espalda. Hacía mucho frío. Sabías que algo malo te había pasado porque el dolor te doblaba. Hiciste fuerza para volver y viste que un hilito de aire entraba por ese mini agujero que daba a lo que te pareció la puerta de un camarote de un barco viejo. Atinaste a pararte pero solo te alcanzó para arrodillarte. Literalmente te mordiste los labios y sentiste que algo húmedo y tibio te corría por el cuello. Algo te quemaba y dolía, pero necesitabas ponerte de pie y llegar a ese hilito de aire para seguir el viaje. Necesitabas respirar.

No sabés qué tiempo pasó pero en tu cabeza empiezan a golpearse imágenes, secuencias, fragmentos de todo lo sucedido. Escuchás que gritan y después sentís dolor. Fuerte. Sorpresa. Golpe. Recordás que ese golpe reproduce el mismo ruido que hace una sandía cuando explota al caerse del carro de un changarín en el mercado central y empezás a sentir un dolor insoportable en la cabeza.

También te duelen todos los huesos, ves que tu cuerpo va cayendo al piso y querés detener la caída pero no podés. Golpeás contra el suelo y sentís que algo grande, un monstruo oscuro de varios brazos  una  especie de araña negra gigante, te arrastra de los pies. Eso es lo último.

Más gritos. Siempre gritos. Te terminás de despertar. Alguien se queja y otros se ríen a carcajadas. Estás congelado. Te das cuenta de todo. Ya no se puede hacer nada. Sentís que la sed quema. Te sentaste en el piso frío y asqueroso de mugre y después terminaste de cara, tirado, en posición de feto.

Habían pasado 16 horas de viaje. Estabas desnudo en un buzón. Te habían sacado bestialmente por la fuerza, después de romperte la cabeza, la cara y patearte todo el cuerpo.

Te llevaron a 1700 km esposado de pies y manos, sin escala para ir al baño.

No sabés cuándo fue. Sabés qué pasó. Y también sabés que estás en Rawson.

NOTA:

Los servicios penitenciarios utilizan en forma regular y como método sistemático de tortura los traslados compulsivo/sorpresivos. A partir de la aplicación de estos se da inicio a un  proceso que des socializa a las personas quienes quedan alejados de los lugares en donde viven sus familiares a los que por razones económicas y de distancia se les imposibilita visitar a los detenidos. También quedan alejados de las sedes de sus respectivos juzgados de ejecución por lo que no ven a los jueces responsables de que se cumplan con los derechos que no han sido conculcados por la aplicación de la pena, quienes son responsables de los métodos de destrucción que las agencias de seguridad del estado aplican sobre los encerrados.

Los traslados compulsivos sorpresivos son un método selectivo de eliminación que se aplica sobre aquellas personas a las que el sistema considera muy peligrosas.

Wam Eliam

Integrante del Espacio LTF. Abolicionismo de la cultura represiva.  desde el año 2015