Nuevo Curso

Domingo mirando al río

Hay un factor común en el lenguaje que construye la clase dominante como “sentido común”y se desliza por las mentes y acciones de las clases buscando su indiferenciación. Emerge en particular en cada momento en que un acontecer social se destaca en la agenda informativa del poder y en la replica vergonzosa que de la misma , de manera meticulosa hace la izquierda del régimen político que impone la dictadura de la burguesía disfrazada de república democrática donde las personas no deliberan ni gobiernan sino a tráves de sus representantes electos en procesos electorales farsesco.  Ese factor común relevante es el odio puesto en acto como desprecio a lo viejo, sea una cosa o un ser humano al que se trata básicamente como una cosa a depositar en algún lugar de la existencia donde “no joda lo joven”.

Se merca con eso, por supuesto, porque vivimos en una sociedad de producción generalizada de mercancía. La gama es amplia va de las practicas bioquímicas en cremas y cualquier producto “rejuvenecedor”. Sigue por la venta de gimnasios, prendas deportivas. Continúa con los sitios de encuentros de “mayores”, avanza con abusos defraudatorios con los elementos de comunicación y culmina con los geriátricos vip.Todo vale en pos de vender algo contra ese enemigo : la vejez , de la que nadie debe ser alcanzado.

Se puede escribir mucho sobre eso, sin embargo, para explicar que es un problema de la modernidad y de la continuidad histórica del capital aún cuando agonice, es importante ir a la literatura y ahí Victor Hugo nos tira un abrazo, aún cuando sus apreciaciones no nos contenga en su totalidad. No es la defensa de la vejez es la lucha por el respeto de esa condición , sobre todo en quienes trabajador toda su capacidad de producción y hoy son arrojados al cajón de los deshechos sin la menor vergüenza.

Buen domingo , para las “viejas”. Las que hicieron lo que pudieron , pero bancaron la parada. Viejas con y sin pañuelo , pero madres al fin. Pueda la historia proyectarla para que nunca más haya día D y sí haya ser humano haciendo su historia humana por fuera de toda alienación

Víctor Hugo , que no es Morales y que no cobraba por hablar , dice:

¿ PONIÉNDOME VIEJO ?

– _Te estás volviendo viejo me dijeron  has dejado de ser tú, te estás volviendo amargado y solitario.

No, respondí; no me estoy volviendo viejo, me estoy volviendo sabio

He dejado de ser lo que a otros agrada para convertirme en lo que a mí me agrada ser, he dejado de buscar la aceptación de los demás para aceptarme a mí mismo, he dejado tras de mí los espejos mentirosos que engañan sin piedad.

No, no me estoy volviendo viejo, me estoy volviendo asertivo, selectivo de lugares, personas, costumbres e ideologías.

He dejado ir apegos, dolores innecesarios, personas, almas, y corazones, no es por amargura es simplemente por salud.

Dejé las noches de fiesta por insomnios de aprendizaje, dejé de vivir historias y comencé a escribirlas, hice a un lado los estereotipos impuestos, dejé de usar maquillaje para ocultar mis heridas, ahora llevo un libro que embellece mi mente.

Cambié las copas de vino por tazas de café, me olvidé de idealizar la vida y comencé a vivirla

No, no me estoy poniendo viejo

Llevo en el alma lozanía y en el corazón la inocencia de quien a diario se descubre.

.Llevo en las manos la ternura de un capullo que al abrirse expandirá sus alas a otros sitios inalcanzables para aquellos que sólo buscan la frivolidad de lo material.

Llevo en mi rostro la sonrisa que se escapa traviesa al observar la simplicidad de la naturaleza, llevo en mis oídos el trinar de las aves alegrando mi andar.

No, no me estoy volviendo viejo, me estoy volviendo selectivo, apostando mi tiempo a lo intangible, reescribiendo el cuento que alguna vez me contaron, redescubriendo mundos, rescatando aquellos viejos libros que a medias páginas había olvidado.

Me estoy volviendo más prudente, he dejado los arrebatos que nada enseñan, estoy aprendiendo a hablar de cosas trascendentes, estoy aprendiendo a cultivar conocimientos, estoy sembrando ideales y forjando mi destino.

No, no es que me esté volviendo viejo por dormir temprano los sábados, es que también los domingos hay que despertar temprano, disfrutar el café sin prisa y leer con calma un poemario.

No es por vejez por lo que se camina lento, es para observar la torpeza de los que a prisa andan y tropiezan con el descontento.

No es por vejez por lo que a veces se guarda silencio, es simplemente porque no a toda palabra hay que hacerle eco.

No, no me estoy poniendo viejo, estoy comenzando a vivir lo que realmente me interesa*

Víctor Hugo.