Sin dudas hay muchas maneras de existir. Nadie, por pedante que fuera se ha atrevido a darse el lugar para decidir como se vive. Sin embargo, si deciden y de hecho lo realizan a diario, las relaciones capitalistas de producción . Tanto lo hacen que los propios signos de lo biológicamente vivo se ponen en crisis en nuestros tiempos.

A cada persona esos desafíos le ponen a prueba a la hora de entender el carácter irremediablemente perecedero de todo lo vivo, tanto que la muerte en sí, esta contenida como su propia negación afirmadora. Por eso la muerte prueba que la vida existe.

Se pierden amigos, padres , más difícil aún pensar en la desaparición física de un hijo, pero más difícil y por fuera de todo egoísmo es saber que hemos de dejar a otros por nuestro propio deceso en esa sensación irremediable de pérdida.

Más tarde o más temprano a todos, reflexivos, impulsivos o pragmáticos la pregunta por el sentido de la vida avanza al punto tal que no solo es una cuestión del intelecto sino un interrogante de lo que debemos sobrellevar cada día y enseguida ese ¿para qué?

Casi mecánicamente , los que tenemos generaciones en espalda , tiempos históricos diversos en recorrida según nuestros propios momentos de vida, es posible que acudamos a hombres distintos para responder a todo esto . En este momento que tengo que presenciar a unos tipos sentados ante micrófono , pasando videos, en el único objetivo de justificarse y confundir, apelando al nombre de León Trotsky desde los propios lugares de confort que supieron conseguir y con el indecible propósito de intentar diseños políticos en presente , parece más que relevante traer para la consideración de propios y extraños y para que por lo menos les dé un poco de vergüenza cuanto menos , la figura de Victor Sergé

Cuando uno pone su nombre en un buscador casi como para sintetizar y para contrarrestar, la computadora devuelve “REVOLUCIONARIO”.  Ese es el mensaje que enviamos desde Nuevo Curso a todo trabajador al que de cualquier manera le pueda llegar nuestra página. A la pregunta del para qué vivir. Respuesta. Para ser como Sergé ; REVOLUCIONARIO.

Dicho desde el propio Víctor Lvóvich Kibálchich , su nombre verdadero, Desde la tuberculosis, el presidio , la persecución stalinista, el desamparo de familiares, amigos , compañeros fallecidos todos en el mismo tiempo del deseo de vivir, este mensaje gravado en el testamento mas vivo de todo el que se conmueve con el hambre, sufre en y por la miseria y aborrece la explotación y la opresión capitalista : “Sobrevivir es la cosa más desconcertante -lo sigo pensando todavía- por distintas razones. ¿Para qué sobrevivir si no es por aquellos que no sobreviven«.

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