Para el pueblo trabajador las actuales condiciones materiales de sobrevivencia son de hambre y miseria. Ambas dejan traducir el proceso inflacionario de los precios que se pagan por las mercancías en forma tal que esa exacerbación se presenta como una suerte de impuesto confiscatorios a los salarios,
Llevado ese cuadro social al espacio específico de la educación, se dejan ver salarios de pobreza para los trabajadores, falta de recursos, abandono de escuelas y un creciente número de edificios sin gas o agua que remiten a un cuadro crítico que se prolonga en el tiempo.
Concentrar el fenómeno educativo, dentro de las estrechas filas de los efectores directos abarcados por su materialidad, implica una adaptación reformista a los moldes que impone el poder burgués. Esa premisa es la que relativiza la centralidad que usualmente se le otorga a los sindicatos de docentes en la confrontación de clases que concretamente se verifica dentro del fenómeno en sí. De allí que también deba relativizarse y medirse con ajuste cuanto se puede inferir del control que los trabajadores de la educación puedan tener de dicha herramienta , que deviene significativa pero no exclusiva.
La política cultural de la clase dominante expuesta por los diversos operadores de la burguesía, tiene un discurso coincidente en cuanto unos y otros aluden de forma generalizada a la presencia de “una crisis de la educación” y remiten a la necesidad de reforma del sistema educativo , concentrando la cuestión en la oferta de recetas pedagógicas y administrativas, ocultando que esos instrumentos son expresión de las exigencias capitalistas , cuyo eje central es la economía de mercado,
Para acabar con la causa real de la crisis de la educación hay que politizar con carácter obrero el abordaje del fenómeno con desarrollo del programa socialista, todo lo cual implica en ultima instancia derribar al Estado para terminar con la explotación y la opresión capitalista de conjunto. En otras palabras, cuanto corresponde a la situación educativa no es en ningún caso una modificación de formas sino una solución radical, que solamente puede darse en el marco de la política desenvuelta por el poder obrero. como la encamación de la política revolucionaria del proletariado que tiende a modificar de raíz la estructura económica de nuestra sociedad.
Las soluciones a la crisis educativa no son técnico-pedagógicas, sino políticas. Debe quedar en claro , con sentido táctico-estratégico, que esa tarea trascendental solo puede ser encarnada y desarrollada por la vanguardia obrera y el conjunto de los trabajadores en sí, en tanto es el proletariado — fuerza de trabajo no propietaria- el que por los intereses objetivos que encarna en el desarrollo histórico es el llamado a sustituir la gran propiedad privada burguesa por la propiedad social de los medios de producción.
Un posicionamiento reformista como el que se sigue incluso de la intervención sindical de los gremios que agrupan a los trabajadores de la educación , centrada en limitarse a la búsqueda del amparo de la lcy o de confiar en que el Parlamento pueda solucionar la cuestión resulta extraño a los intereses de la clase trabajadora y esteril para la superación de la conflictividad abierta por la crisis del modelo educativo. Nuevamente se pone en evidencia que lo que está cuestionada es la globalidad de la política gubernamental y su tendencia definida a mudar el formato de este servicio esencial al molde de la privatización, el mercado y la ley del valor . Por lo demás la forma jurídica exigida o pretendida deja en claro que tienen por meta esencial traducir la voluntad del capital imperialista con sus agencias empeñadas en bajar los costos de producción sacando ventaja de los bajos salarios, la eliminación de los beneficios sociales y la preparación del hombre en la no preparación que se sigue de las actuales modalidades de trabajo cada vez más rutinario y repetitivo, para que rinda mas y tenga menor costo de reproducción de la fuerza humana empeñada en esa labor .
Estamos frente a un lineamiento táctico de la política burguesa que busca acentuar el proceso de deshumanización del hombre y su consolidación en un simple objeto sujeto a control por el orden burgués Para esta situación la educación debe preparar un tipo de individuo capaz de limitarse a repetir lo indispensable, sin dedicarse a pensar en otras cosas o a investigar los problemas sociales y políticos de su comunidad. La superespecialización busca robotizar al hombre, para que rinda mucho y coma poco. Sabemos que de esta manera
La reforma exigida por el capital y sus personeros políticos, no es otra cosa que colocarle parches a la vieja escuela para que pueda servir mejor a los propósitos de la burguesía. Limitarse a repetir lo indispensable, sin dedicarse a pensar en otras cosas o a investigar los problemas sociales y políticos. La superespecialización busca robotizar al hombre, para que rinda mucho y coma poco. Sabemos que de esta manera se busca agravar la deshumanización del hombre
Únicamente el proletariado puede llevar a los actualmente esclavizados a convertirse en gobierno, a tomar el poder político y desenvolver una transformación radical del área social educativa. Es la política revolucionaria del proletariado la que da la respuesta adecuada a la urgencia de transformar radicalmente la educación, de crear la escuela nueva
El programa socialista deja traducir como premisa básica que hace carne en los trabajadores conscientes que se constituyen en sí y para sí como sujeto histórico del cambio social a partir de que el obrero se conoce actuando sobre la realidad para transformarla, lo que permite transformarse a sí mismo, siendo este y no otro el objetivo de la labor educativa.
Conocer es la cuestión esencial de la educación y eso no se consigue por la simple repetición mecánica de recetas pedagógicas y formatos productivos específicos .Se conoce actuando sobre la realidad para transformarla y esa práctica transformadora no es otra cosa que la participación en el trabajo social.
La educación necesaria para humanizar al educando y permitirle el desarrollo completo de la individualidad requiere de la revolución social que la geste y ese el contenido objetivo de la militancia de la vanguardia de la clase trabajadora , para lo cual se ve obligada a poner especial atención en solucionar los problemas que se plantean a las masas cotidianamente, de tal manera que aproxime a éstas a la conquista del poder, haciendo consciente que el conjunto de explotados y oprimidos maduran políticamente asimilando su propia experiencia en la lucha diaria espacio donde llegan a conocer el papel que cumple el Estado en la lucha de clases, y el imperativo de su destrucción.