Aprovechando celebraciones navideñas, y con apelación a cierta nostalgia que inspiran estas fechas, se pudo ver en las redes sociales, una fotografía que llega de la mano de nuevas versiones intelectuales de lo viejo.
Esas acciones creemos deben ser denunciadas de frente a toda la clase trabajadora para que teniendo la posibilidad de advertir el fraude saque sus necesarias conclusiones.
No es nuestro propósito decir lo que «debe ser», pero tampoco nos parece que el silencio sea la actitud necesaria ante el error inducido al que apunta esta aparente inocente imagen.
La valentía es el mayor desdén que un ser humano le tiene a la muerte. Es la generosidad, el amor superior a la vida propia individual. En la misma medida, implica el momento más alto de un militante porque toda búsqueda constructiva de un orden socialista lleva en sí para cada uno que se involucra en teleología, ama la vida ´por definición misma del principio de justicia propio de ese orden social y su construcción le da el sentido último al existir.
Aquel que solo justifica su estadía en este mundo de lo sensible por los bienes que acumula y las acciones de poder que puede llegar a desplegar sobre otros a los que domina y somete, solo hace un culto de un artefacto humano concentrado en ideología que es la imitación farsesca de las potencialidades vitales que aún exhibe la naturaleza, la dignidad humana y el valor justicia.
Nuestras décadas bajo la república burguesa, que Alfonsín al asumir su mandato había dado por perdida, que engañosamente llamó a reinstalar cuando en realidad nunca se había ido sino que había necesitado del uso de prácticas genocidas y transitoriamente travestirse abiertamente en dictadura de clase ,para la sobrevivencia de la clase dominante, no ha hecho otra cosa que concentrar la riqueza en grupos que son protagonistas de todos los juegos especulativos que ella habilita, los que para actuar en libertad se encolumna formalmente tras las acciones de gobierno de los operadores del poder habilitado por las formas legales.
Pero esta miseria, que es efecto inmediato y necesario de esa especulación, que como río de montaña crece rápida y desmesuradamente, no se manifiesta solo en plano de recursos y necesidades insatisfechas, sino que se entrevera y da sentido a todos los elementos del existir
Esa lamentable constatación, nos lleva a tener que afrontar en nuestro camino numerosos obstáculos ideológicos, que se dirigen hacia nosotros incluso con forma humana y preocupación por el cambio social al que dicen adherir adoptando los ropajes simbólicos a los que da lugar. Muchos por fuera de los medios masivos de comunicación y personajes formadores de opinión, anidan en las radios comunitarias y muchos dispositivos tecnológicos que permiten las redes.
La cuestión requirió previamente afiliarse con fervor fanático e imponer la ideología del horizontalismo, con la cual lograr el desguace de la concepción de partido revolucionario, so pretexto del culto a la posibilidad de la crítica de la crítica, adulterando la noción por el paradigma según el cual cualquiera puede decir cualquier cosa según se le antoje y según la coyuntura sin asimilación de verdad en sus dichos a partir de su adherencia a un programa político socialista.
Ahí quedaron en el camino los canales partidarios por donde hasta entonces, se buscaba dar curso al una corriente humana coincidente en el objetivo transformador y aparecieron las diásporas, los grupos con mil nombres, las llamadas organizaciones sociales, etc, todos con mucho bombo, mucha murga, mucho ruido y mucho despelote organizativo que permitió la emergencias de kioscos políticos cotizando al mejor postor o a la mejor migaja que tirara el poder político burgués cualquiera fuere el signo de esa administración , y desarrolló la génesis de la formación corrupta por definición de una burocracia piquetera.
Paradójicamente en la base de todo esto, una oligarquía de sujetos presuntamente pensantes, entramó desde el club de cultura socialista, las cátedras que les “donara” el poder burgués en las facultades donde se reunían las llamadas humanidades, los restos vergonzantes del Stalinismo con polvo en sus ropas por la caída del Muro de Berlín, sus bancos cooperativos y sus institutos de cultura , y los retornados del exilio , establecieron la unánime adhesión explicita o implícita a la tesis según la cual , la historia de la lucha de clases en Argentina había demostrado que en la república democrática, no corresponde la lucha armada . Caras serias indicando que ahí había estado el error del PRT-ERP, o las carreras con marcas olímpicas para ir en su momento a repudiar el combate desarrollado en el batallón de La Tablada nutriéndolas de infinitos conceptos peyorativos respecto de esa iniciativa.
Después de ese operativo, y sin vergüenza alguna, se sentaron a conversar con los discursos post, y si había algo de que nutrirse en términos de obtención de ese nuevo mecenazgo rociado con Lacan por doquier, trasladaron las particularidades del hacer universitario a otros espacios y todo el mundo que les prestara orejas se creyó en la posibilidad y dotado de aptitud para el discurso de coyuntura y las opiniones que fueran necesarias.
Militar de manera organizada como consecuencia de aceptar ser parte orgánica de una construcción partidaria revolucionaria, paso a ser cosa de rusos del 1917 a los que se les decretó la caducidad forzada y se los sustituyo por un renovado populismo progresista con matices reformistas de época modelo “podemos” como para no quedar mal con Europa, que sin embargo se parecía bastante a aquel del texto de Lenin “a que herencia renunciamos”.
Estas aguas son las que nos condujeron a todos sin distinción a estas playas, donde la vocera de las organizaciones de la bancada parlamentaria que antes de decirse trabajadora se autodefine como “la izquierda” se asimila cada día más a una militante de base de Patria Grande , que a un pregón de la revolución social de la que solo se acuerda cuando lee en forma rutinaria ,su discurso del 1 de mayo .
Pero esto no sería en sí el mayor problema aunque sin duda lo es , también en esa sintonía aunque por supuesto, también tildando a todo lo que huela a lucha revolucionaria de caduca y obsoleta, se le suman los ya altamente entrenados profesores universitarios cuando nos pontifican que la revolución permanente no es para nuestra historia de lucha de clases; que El Capital es un libro que debe ser ubicado en esos rincones de biblioteca donde la tierra y los bichos hacen lo suyo porque está muy bien pero el mundo cambió y todo exige renovación , o por su intermedio se refieren a Trotsky remedando González Tuñón quien
Quien celebró su homicidio a manos de Ramón Mercader , un sicario Stalinista , señalando:
“En Coyoacán, palacete campestre pagado por el dinero norteamericano, ha muerto León Trotsky, literato notable, hombre pequeño y traidor del Partido Comunista y de la Unión Soviética. Nunca fue antifascista. En la radio de Ámsterdam por diez mil dólares –en los años terribles- dirigió al “New York Times” un mensaje –él, el hombre de la ‘revolución permanente’- delatando y calumniando a sus viejos camaradas del Partido. Hoy que la prensa reaccionaria del mundo canta loas a su pobre cadáver de viejo resentido arrojándole la final paletada de tierra de ignominia, cómo se agranda la figura de Lenin cuya memoria fue escupida por los que hoy exaltan al Traidor, y cómo se agranda la figura de Stalin, el fantasma del fascismo y del imperialismo, la expresión suprema de nuestra causa y de nuestro Partido. Atrás, pequeño hombre. Recién ahora tu carne torturada de envidia y fiebre oscura, tendrá un sentido, una función, pero los pueblos y el Partido no olvidarán que hubo un traidor. Atrás, pequeña sombra de lúcida maldad. Silencio sobre la tumba del pobre León Trotsky, cuidador de conejos, esposo y padre. Que su ceniza tenga paz, pero no su memoria”
No obstante esta crianza de cuervos que se dicen novedosos y no hacen otra cosa que remedar las formas culturales difamatorias del Stalinismo, hace su rutinaria aparición con textos e imágenes que llevan advertir , como desde los que se dicen “intelectuales “ se despliega una funcionalidad aberrante para la adhesión al pensamiento dominante gestado desde las usinas productora de falsa conciencia del propio gobierno
Buscan poner a Stalin nuevamente en la palestra , para luego desde allí darle base y sentido, al discurso anticomunista del poder burgués, ya que este se desenvuelve advertido que necesita gestar un enemigo al estilo 1984 de Orwell
También el poder burgués ha advertido , en el mismo momento, que existe una mínima reacción a su gestión, que no asocia a ese objetivo de nueva sociedad de corte estratégico que es el socialismo, con el estado burocrático que condujo el criminal Stalin y la burocracia de la que era exponente , al poder.
Dicho de otra forma, caído el muro de Berlín y conocida de manera documentada las acciones criminales de la burocracia que se adueño del poder tras la muerte de Lenin en la Unión Soviética , en particular aquellas que el propio Trotsky ante los llamados Procesos de Moscú se ocupó de difundir, el ostracismo al que fuera conducido por la evidencia .
Stalin, ha cesado , y nuevos muchachos , que no se visten con capote militar , ni evocan las nieves de San Petersburgo, se ocupan de vender nuevamente carne podrida , colocando al Georgiano, en el podio de los lideres revolucionarios , y a la par de desmerecer a la revolución de octubre de 1917
En este último sentido, la tesis que difunden es la siguiente:
La lección que podemos sacar es que el “mundo” de la revolución rusa ya no existe, de modo tal que el período de guerras y revoluciones, si alguna vez tuvo sentido, no tiene vigencia actual. Por lo tanto, la caracterización de la etapa, como guía para nuestra acción política revolucionaria, debe partir del análisis del cambio en la materialidad del proceso de trabajo, operado a mediados de los ‘60, y la consecuente nueva división internacional del trabajo. (La relación capital-trabajo es la existente y las formas no han modificado la sustancia. Las relaciones interimperialistas, el fenómeno del imperialismo en sí y la dinámica específica de guerras y convulsiones sociales no ha cesado)( lo incluido en éste paréntesis nos corresponde)
Esta afirmación se completa con la siguiente;
Las respuestas de nuestro presente, entonces, están adelante, no en el pasado, no en la revolución rusa. Podemos reivindicar el proceso por el cual la clase obrera desplegó sus potencias, podemos aprender de los errores, pero no reproducir ni recrear, porque es imposible, la URSS. Nada más, nada menos.
Lo que nos queda simplemente frente a esto, es dar cuenta de la proliferación de esta tendencia a manos de medios tecnológicos que riegan las redes de todo lo que implica en última instancia un inmenso, gigantesco, NO a toda acción de los trabajadores en miras a la construcción de una nueva sociedad, incluso un NO grande a todo acto de determinación de voluntad que da cuenta del agobio al que nos somete esta sociedad de explotadores y explotados. La foto que ilustra nuestro comentario lo dice sin necesidad de otro discurso que no sea el emergente de esa imagen construida incluso sin referencia histórica alguna.
Por décadas la burocracia en el uso del poder del Estado intentó por todas las formas de hacer real esa imagen que reproducimos en este texto tomada de un sitio que es un ejemplo de estos haceres orgánicamente funcionales a la burguesía. Sin embargo, respecto de aquellos usos bajo el régimen Stalinista, el desenvolvimiento de los hechos dejó ver la impostura. Curioso, esos métodos se utilizaron tras la muerte de Lenin, para poner en fotos históricas de la revolución de octubre a Stalin cuando este no había estado presente en ellos. También es curioso que se centre en este objetivo de meter a Stalin en la tradición revolucionaria, ligarlo a Marx, cuando siendo su negación, solo cosechó en sus haceres, muerte represión, hambrunas y le dio a la libertad avanza la posibilidad de utilizar la misma confusión, es decir Stalinismo con Comunismo, para usar las tragedias humanas en contra de los trabajadores que han decidido luchar. Pueden entonces brindar con Milei, pero nunca con Marx sencillamente porque Marx no hubiera brindado con semejante asesino.
Cuidado que están aquí,
caminan por estas calles
y comienzan a reír,
se escudan en un rosal
y esperan entre las sombras.
Ellos caminan libres,
como todos bajo el sol.
Cuidado que vienen ya
vestidos como inocentes
con la sombra del puñal.
NUEVO CURSO